Yo te busco

Yo te busco porque sé
que tu sabrás entender
a un hombre cansado de laberintos
y porque sé que traerás aire fresco
a este compartimento estanco
que he convenido en llamar corazón.
O razón.

Yo te busco en todas partes porqué sé
que te llamas isla y ventana
y no pared ni cerradura
y porque buscas cisnes
en las piscinas municipales.

Yo te busco porque sé
que tu risa se come a la pena
y en tu cara cristaliza la calma
y porque dejas restos de alpiste en las sábanas
tras salir a volar.

Yo te busco por tu bondad sin antifaz
y porque a tu lado la tristeza
pasa de perfil y nunca acierta
y te busco porque cuando besas
la ciudad pierde sus límites
y eso es algo necesario cuando todo
son muros.

Yo te busco porque te da igual
la marca de sujetador y las sortijas
y tienes polen en los labios
y en tus ojos se deposita el descanso
y siempre buscas entender a los niños sucios
que gritan desde los corazones de los hombres.

Yo te busco porque sé
que cuando no te salgan las cuentas
no te conformarás con despojos ni regalos
porque no te alquilas
por un sueño
y te dan igual los focos.

Yo te busco porque
no ahogas en tus necesidades
a quien te escribe
porque en tu idioma sólo hay sitio
para la palabra construir.

Pero sobre todo te busco
porque te niegas a ser
una simple turista de la hermosura.